De acuerdo con la compañía, la consolidación busca reducir la volatilidad de las acciones para que sean más atractivas para los inversionistas institucionales.
Con esta medida cada titular tendrá derecho a adquirir una acción a siete veces el precio original.
El split inverso surge después del escándalo de irregularidades en el área financiera en la compañía y la pérdida de confianza entre los accionistas a finales del año anterior. Junto con la consolidación, la compañía también anunció que cambiará su nombre a PetroMagdalena Energy Corp.
De acuerdo con el director del área de Investigaciones Económicas de Alianza Valores, Felipe Campos, el split inverso de Alange obedece a cambios contables y sicológicos sobre el precio de las acciones, con los que se logra un cambio importante en el precio sin afectar la rentabilidad del inversionista.
El experto señala que los splits inversos agrupan acciones y las vuelven solo una y en el caso de Alange se le pediría a los accionistas que entreguen 7 acciones y reciban 1, que en el mercado valdría lo mismo que el paquete que entrega. En este sentido, si la acción vale US$0,22 ahora la nueva acción valdría (7 x 0.22) esto es US$1.54.
”La nueva acción no vale centavos, entra a un grupo de acciones que ya no son tan junior y que algunos inversionistas institucionales, que tengan limitaciones para invertir en acciones por debajo de US$1 puedan comprar. Así mismo, hay un efecto matemático importante para este caso específico. Con la acción a US$0.22 cada transacción 1 centavo arriba o abajo significa un movimiento diario cercano a 5%. Lo cual crea una volatilidad intolerable”, afirmó Campos.
Para el analista, el punto negro de este tipo de splits es que tienden a realizarse sobre acciones presionadas a la baja. “El riesgo es que los inversionistas sientan que tienen margen para ver o que tengan como referencia el precio antes del split. Es por esto que pueden existir presiones bajistas en este tipo de acciones una vez el split inverso esta listo”, dijo.
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