Para lograr rentabilidad y crecimiento, construye una estructura de negocios fuerte para tu emprensa que permita el flujo natural y eficiente de los recursos.
Salvo pocas excepciones, la respuesta a esta pregunta (¿cómo lograr que mi negocio perdure y crezca en el largo plazo?) es la misma para toda pequeña y mediana empresa (Pyme), ya sea que pretenda llegar a ser rentable en 50 meses o en 50 años. Y en realidad no es un asunto de costos: se trata de la estructura del negocio. Los costos y recursos fluirán de manera natural y eficiente a partir de una estructura sólida y en correcto funcionamiento.
Por eso, conoce cada una de estas estrategias clave para incrementar tus posibilidades de lograr un crecimiento sostenible y escalable, asumiendo, por supuesto, que tu público meta desea el producto o servicio que ofreces.
Establece controles financieros estrictos. De esta manera, genera información sólida sobre la cual tomar decisiones y reduce el riesgo de fraude y robo. En pocas palabras, hasta en tanto no sepas a dónde va cada centavo, tu negocio no estará dando pasos firmes.
Minimiza las distracciones. Como director de finanzas he sido testigo de cómo el dueño de un negocio, al sentirse libre de las preocupaciones del flujo diario de efectivo, puede concentrarse con éxito en el futuro, construyendo relaciones, desarrollando nuevos productos y servicios, y supervisando otros aspectos del panorama general. El siguiente paso es contratar gente confiable y hábil para que se encargue de los detalles. Vale la pena.
Incrementa las ventas. ¿Es obvio? Sí, pero nunca olvides que una compañía más grande conlleva un riesgo menor que una más pequeña.
Diversifica productos y servicios. Ampliar las ventas a través de más consumidores, líneas de productos o mercados reduce las contingencias e incrementa las oportunidades de crecimiento.
Racionaliza, codifica y documenta los procesos. El sello distintivo de las organizaciones fuertes es la calidad, consistencia y documentación de la manera en que operan. Este es el primer paso que dan los empresarios que piensan franquiciar su negocio para determinar si sus ideas se pueden replicar. Si quieres convertir tu negocio en una compañía más grande, tienes que actuar como si ya lo fuera.
Mejora la eficiencia. Debido a que la mayoría de las empresas se valoran a partir de sus ganancias, cada peso que represente un avance en este aspecto resultará en un valor estimado en más pesos, independientemente de si tienes operando cuatro años o cuatro décadas.
Protege tu propiedad intelectual. Asegúrate de que tienes los derechos apropiados para tus marcas, nombres, diseños, tecnologías, etc. Gastar ahora unos cuantos miles de pesos en un abogado especialista en propiedad intelectual puede ahorrarte millones y un montón de dolores de cabeza más tarde.
Dale mantenimiento a tu equipo. Ten siempre acceso a un fondo que se pueda usar para aprovechar las mejoras tecnológicas, expandir operaciones y mantener todo en perfecto funcionamiento.
Reduce la rotación de personal. Considera que ofrecer más dinero no necesariamente crea una fuerza de trabajo más leal y productiva. El respeto, una administración justa y la inclusión en la toma de decisiones tienen efectos perdurables.
Evita competir en los precios. Concentrarse en vencer a las empresa competencia ofreciendo precios más bajos puede generar un círculo vicioso que poco a poco destruya tu margen de ganancia. Tienes que conseguir que los clientes te elijan por la superioridad de tus productos y servicios, no porque eres el más barato.
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