Desconocer cómo funcionan los instrumentos financieros, no tener claro su capacidad de endeudamiento, carecer de un ahorro o no tener un presupuesto para los gastos mensuales, son algunas de las malas prácticas que ponen en peligro las finanzas.
«Como en cualquier otro aspecto de la vida, muchos de nosotros tenemos hábitos destructivos, que nos impiden llevar las finanzas personales en orden. Uno de ellos es la mala concepción que los colombianos tenemos del crédito, pues en nuestra cultura el crédito necesariamente convierte al ahorro en un sacrificio», explicó Luisa Fernanda Plazas directora de crecimiento del cliente de Skandia.
Estos son los siete pecados capitales en las finanzas personales de los colombianos:
No ahorrar
El colombiano promedio no piensa en ahorrar parte de sus ingresos para crear un capital. Acá ahorrar significa hacer mercado cuando hay promociones, comprar servicio de televisión, cable e internet en paquete; y recurrir a tiendas que ofrezcan buenas promociones.
En general el colombiano consume más de lo que recibe y cubre sus excesos por medio de créditos, expresó Plazas quien añadió que la gente gasta 110 por ciento de lo que gana. La teoría de planeación financiera dice que se debería ahorrar al menos el 20 por ciento del salario recibido.
– No saber manejar el crédito
Más preocupante que el ahorro, es la cultura de crédito. Los ciudadanos no están diferenciando entre cuando es necesario pedir algún crédito y cuando no. Los colombianos se endeudan para darse gustos anticipados, y por eso deben asumir estos costos durante varios años.
– No llevar un presupuesto de gastos
La recomendación de Skandía es que las personas deberían tener un presupuesto, más que un control de sus gastos. Una familia debe manejar sus ingresos como una empresa, para distribuir mejor el dinero.
– Gastar más de la cuenta
No se pueden cumplir objetivos a largo plazo si no se tiene el corto plazo resuelto. Somos muy dados a `tapar huecos`. Es clave integrar los ingresos extra con el presupuesto anual para tener una meta financiera clara.
– No tener fondo de emergencias
Aunque el colombiano se preocupa por tener asegurado su carro y su casa, poco se preocupa por los imprevistos y regularmente termina acudiendo a la ayuda de un familiar o amigo. Se debe crear un fondo de emergencia con recursos equivalentes a un mes de salario, por lo menos.
– Nunca piensa en el testamento
Revise los beneficiarios de las pólizas de seguro y de las cuentas bancarias, para evitar líos cuando usted ya no esté.
– Desconocer el instrumento bancario
Existe una fuerte cultura de banco en Colombia, con la errada concepción de que es un favor de la entidad otorgarle un préstamo al usuario. «La gente se siente feliz y agradecida cuando le desembolsan dinero, pero no pregunta mucho porque siente que está recibiendo un favor, aseguró Luisa Plazas. Sería ideal que las personas pensaran que cuando están adquiriendo un crédito, el banco le está vendiendo su servicio y así mismo va a cobrar por él, añadió. La gente no solamente debe fijarse en cuánto va a quedar la cuota sino en cuál es el plazo, la tasa efectiva anual y también si la cuota es fija o no.
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