El Tribunal Disciplinario consideró que la sociedad administradora de pensiones y cesantías incurrió en noviembre de 2009 (antes de la reciente adquisición por parte del Grupo Sura) en la conducta de manipulación de la acción de Promigás con el fin de generar una baja en su cotización.
Igualmente encontró a Juan Felipe Yarce Villa, gerente de inversiones locales de ING en el momento de la ocurrencia de los hechos, responsable de la realización de las operaciones que configuraron la conducta.
El AMV le impuso al directivo una suspensión de tres años y una multa de 200 salarios mínimos mensuales legales vigentes (unos 113’340.000 de pesos).
Por su parte, el Grupo Sura (actual propietario de ING Pensiones y Cesantías) manifestó su respaldo al procedimiento y a las decisiones tomadas por el ente de autocontrol.
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