Recuperación por fiscalización suma $1,6 billones frente a $10 billones que se
dejan de pagar.
La meta de recuperación de ingresos tributarios que se dejan de pagar por cuenta de la evasión, era de 1,6 billones de pesos para este año y ya fue lograda en la Dian.
No obstante, el tamaño de este fenómeno, que se calcula, impacta los ingresos del Estado en 10 billones de pesos, llevó a la entidad encargada del recaudo de impuestos a diseñar un plan de choque anual, que ya está listo para ser presentado al Ministerio de Hacienda.
Para este año, las acciones se concentrarán en cuatro sectores, pero también pondrán la lupa en las zonas francas y seguirán teniendo el ojo encima de los contribuyentes del impuesto al patrimonio y las personas jurídicas y naturales sujetas al impuesto de renta.
Así lo confirmó Claudia Rincón, directora de gestión de fiscalización de la Dian, quien explicó que, “algunos subsectores del agro, los temas de construcción, minero energético y los beneficiarios de la ley de empleo son los escogidos”.
LOS AUDITADOS
En ellos, se seleccionaron 2.530 contribuyentes a los cuales les adelantarán auditorías para verificar que el cumplimiento de su obligación tributaria se está realizando acorde con la ley.
“Se escogieron porque en ellos encontramos comportamientos más informales, indicios del uso de cédulas de personas fallecidas, por ejemplo, para aumentar gastos y pagar menos impuestos”.
En el sector agropecuario se hará énfasis en la producción de arroz y en particular en los molinos y sus proveedores.
“Aquí hemos encontrado personas que se inscriben como agricultores de arroz, pero no pueden demostrar su condición, no tienen contrato de arrendamiento de su parcela o título de propiedad de la misma.
EVASIÓN CON LEY DE EMPLEO
En cuanto a las personas que se inscribieron como beneficiarias de la tarifa reducida del impuesto de renta, por ley 1429 o de formalización y generación de empleo, la Dian halló irregularidades que la indujeron a escoger a este bloque de contribuyentes para realizarles auditorías.
“Esa ley dice que las empresas nuevas que se formalicen, pueden acogerse a una tarifa del 0 por ciento en renta durante 5 años. 1000 empresas se inscribieron como beneficiarias y, sin embargo, cuando hicimos el cruce con Cámara de Comercio no aparecen como empresas nuevas”, explica la funcionaria de la Dian.
En el sector constructor hay indicios de compañías que están utilizando costos y gastos inexistentes, a partir del uso de la identidad de ciudadanos incautos que a veces no saben que son involucrados o que participan por dinero.
“Este sector ha tenido un auge importante en estos años.
Es más, es uno de los que ha jalonado la economía, pero no crece en términos de recaudo”, manifiesta Rincón.
Según confirmó la funcionaria de la Dian, para este año, además de firmas constructoras grandes, harán una prueba piloto con los concesionarios de obras viales.
HALLAZGOS EN ZONAS FRANCAS
Comportamientos que la directora de fiscalización de la Dian cataloga como ‘extraños’, hallados en pruebas piloto realizadas en zonas francas, durante 2011 y 2012, llevaron a la entidad a incluir estos negocios en el plan de choque contra la evasión.
“Las zonas francas de usuarios de bienes y servicios tenían -hasta la reforma tributaria del 2012- una tarifa del 15 por ciento para el impuesto de renta. Pero el usuario comercial de zona franca tenía la tarifa general: 33 por ciento.
“Detectamos que muchas empresas ubicadas en zona franca dicen ser usuarios industriales de servicio para acogerse a la tarifa reducida, pero en realidad adelantan una actividad comercial que normalmente es bodegaje o almacenamiento.
Se ahorran 18 por ciento del impuesto”.
SECTOR MINERO ENERGÉTICO, EN LA MIRA
El último de los grupos que estarán en la mira de la Dian es el sector minero y de hidrocarburos que, si bien es uno de los que más aporte tributario hace al fisco, también es uno de los que mostró comportamientos que llevaron a la dirección de fiscalización a incluirlos en el paquete a auditar.
“Este es uno de los sectores más regulados, porque si uno habla del agrícola, se entiende que es más informal, pero tenemos indicios que nos llevan a tenerlos en la mira”, indica Rincón.
Finalmente, se harán pruebas piloto en ganadería, atendiendo la alta informalidad que rodea al sector y la dificultad para controlarlo. Y en el sector transporte, por las mismas razones”, concluye la funcionaria.