Imagine que las aerolíneas también operaran restaurantes. Viviríamos en un mundo en que medio sándwich, el equivalente a un boleto de ida, podría costar el doble que uno entero.
La forma de hacer negocios de las aerolíneas es muy peculiar. Pocos sectores tienen tantas reglas y restricciones, impuestos y tarifas, frustraciones y interrupciones. Tampoco es fácil encontrar otras industrias donde los precios varíen tan a menudo. Y es raro hallar una empresa que cobre a sus clientes multas de cientos de dólares.
¿Por qué hay tantas diferencias? Las aerolíneas afrontan desafíos únicos, como la facilidad de comparar precios a nivel mundial, altos costos de equipamiento, complicados contratos laborales, la vulnerabilidad a los precios del petróleo y estrictas regulaciones gubernamentales. Y casi todo sucede a la intemperie, sin importar cómo está el clima.
Además, el negocio se ha vuelto mucho más complejo en los últimos años. Se han ensayado estrategias simplificadas de precios, pero han fracasado, mientras que las tarifas y multas que generan ingresos han ido en aumento. «Es un negocio realmente complicado», dijo R. John Hansman, director del Centro Internacional para el Transporte Aéreo del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT). «Hay tanto que depende de tantas cosas más allá de su control», explica.
La operación está tan interconectada que un vuelo retrasado puede atrasar a otros tres o cuatro. «Alguien se equivoca con un sándwich, pero eso arruina a otros 40 sándwiches», indicó Hansman.
La estrategia de precios de las aerolíneas enerva a los pasajeros, pero genera envidia en otros sectores. A muchas empresas les gustaría segmentar a sus clientes y ofrecer precios distintos en función de su capacidad de pago, sostiene Jan Brueckner, economista de la Universidad de California en Irvine. Las tiendas de alimentos utilizan cupones de descuento, pero las aerolíneas han llevado este modelo a un extremo. «Es como si los precios de los cereales cambiaran hora por hora en los estantes de la tienda», puntualizó Brueckner.
¿Y si así fuera? Decidimos como experimento crear un universo alternativo gestionado por las aerolíneas.
Tienda de sándwiches Alas
Los precios suben cerca del mediodía, cuando se acerca la hora de almuerzo y aumenta la demanda. Puede costar más producir un sándwich de carne que de atún, pero si los ejecutivos del banco de enfrente prefieren el atún, será el más caro del menú.
Alas sigue de cerca a la competencia. Si la tienda de al lado dejó de ofrecer mortadela, entonces su precio subirá al doble rápidamente.
Sitio de compras en línea Airmazon.com
El minorista de Internet emplea una flotilla de computadoras para fijar el precio de un par de jeans. Los que se compraron y se usaron un martes y miércoles en febrero suelen ser los más baratos. Los que se compraron como un regalo en diciembre cuestan más. Si quiere usar los jeans enseguida, su precio puede ser 10 veces mayor que si los compra con 30 días de antelación. Cualquier ítem adquirido con un descuento no podrá devolverse, a no ser que pague una tarifa de US$200.
Airmazon tiene un programa de fidelidad de clientes donde los puntos se pueden canjear por mercadería, pero le conviene más hacerlo durante los meses de menores ventas.
Si Airmazon se retrasa en la entrega de su pedido, la empresa no se hará responsable si fue culpa del tiempo o el tránsito. Si sus jeans no llegan debido a un problema dentro del control de Airmazon, la compañía le prestará pantalones de ejercicio.
Hotel L’Aire
Usted reserva una habitación de hotel y recibe cuatro paredes por una noche.
En este hotel, todas las comodidades son a la carta, de modo que los huéspedes sólo pagan por lo que usan. ¿Quiere una cama en su habitación? Cuesta US$50 adicionales por noche. ¿Planea darse una ducha? Hay un recargo por agua caliente de US$15 por una ducha de 10 minutos. Hay un televisor, pero si quiere usarlo puede traer su propio control remoto o alquilar uno por US$3 la noche.
En el hotel L´Aire, reservar una habitación en particular con anticipación le costará US$10. Puede pagar US$10 más por registrarse antes de tiempo. ¿Quiere usar los ascensores prioritarios? Son otros US$10. Hacer el trámite de salida en línea es gratuito, pero si lo atiende un empleado de recepción hay que abonar una tarifa de US$25 por hablar con una persona de carne y hueso.
Equipo de béisbol Los Pilotos
En los partidos de Los Pilotos, el comprador debe asociar un nombre al boleto y no puede cambiarlo. El objetivo es impedir que una persona o empresa compre entradas para toda la temporada —algo que está prohibido— y luego permita que mucha gente distinta las use.
La política de no permitir los cambios de nombre impide que los grupos que hinchas más asiduos al béisbol, o emprendedores con recursos que podrían tratar de controlar el inventario de boletos, compren muchos asientos con descuento por adelantado y luego se los entreguen a otros. (No es una regla inviolable: Los Pilotos, al igual que algunas aerolíneas, cambian los nombres de los boletos, previo pago de una tarifa).
La reventa de entradas para ir a ver a Los Pilotos está estrictamente prohibida. Tampoco se las puede dar a un amigo si no puede usarlos. La boletería de Los Pilotos tampoco permite cambios, a no ser que quiera pagar una tarifa de US$250 por entrada.
De vez en cuando, los jugadores de Los Pilotos llegan tarde a algunos partidos o la lluvia obliga a retrasarlos. No se preocupe: Los Pilotos prometen mantenerlo al tanto, aunque probablemente puede obtener mejor información a través de su smartphone.
Supermercado Precio Completo
Con el fin de atender a más clientes, precio completo, que se especializa en alimentos de primera calidad, acaba de reducir el tamaño de los pasillos entre las estanterías. Eso creó más pasillos y más ingresos por tienda.
Los compradores se quejan de la falta de espacio y Precio Completo recientemente habilitó pasillos más amplios para los clientes que están dispuestos a pagar precios más altos. Los llaman «Turista extra», aunque los pasillos tienen el mismo espacio que cuando la tienda empezó a operar.
La empresa también lanzó una línea de Mercados Precio Completo regionales, locales más pequeños administrados por contratistas. Precio Completo afirma que estas tiendas le permiten a la empresa ofrecer alimentos a comunidades más pequeñas que no son lo suficientemente grandes para instalar toda una tienda Precio Completo. Pero sus clientes se quejan de que los precios son más altos, los pasillos son incluso más estrechos y las bolsas de compras se pierden.
Escuela primaria los Hermanos Wright
Todas las mochilas deben caber en el pequeño casillero provisto por la escuela y deben pesar menos de 11 kilos.
En el caso de que una mochila pese más, se cobrará una tarifa de exceso de peso por la mochila. Si no hay lugar para la mochila, se guardará por separado hasta la última clase del día. Las bolsas de gimnasia pueden guardarse en los casilleros del gimnasio a un precio de US$25 por bolsa, un pago del que el equipo que representa al colegio en torneos interescolares y los estudiantes que tienen un pase de autobús de nivel platino están exentos.
A propósito, a partir del próximo ciclo lectivo, también se empezará a cobrar una tarifa por las mochilas que se guarden en el pequeño casillero.