Al hablar cotidianamente, todos usamos la modulación de forma natural; sin preocuparnos mucho del tono o la velocidad que debemos imprimir a nuestras palabras. En una presentación de trabajo, para que el discurso tenga éxito, es necesario prestar atención a la entonación, la inflexión o la velocidad de tu voz.
La empresa de capacitación empresarial Dale Carnegie Training nos ofrece cinco claves para hacer una presentación y crear una buena impresión en tu audiencia:
El miedo puede paralizarte, así que prepararse bien ayuda a saber qué hacer cuando llegue el momento de hablar.
Tú eres el que domina el tema del que vas a exponer, así que estudia tu discurso para que fluya sin dudas o tartamudeos. Que se sienta sincero y tuyo.
El tono de voz te permite hacer hincapié en distintas partes de tu presentación. Un tono más alto sirve para destacar algún punto clave, un tono más bajo transmite seriedad, incluso respeto por lo que decimos. Si no varías el tono, le estás dando a cada una de tus palabras el mismo valor, asegúrate de entonar de la manera que deseas.
La velocidad o la falta de ella, te permitirá transmitir significado detalle y énfasis. Un ritmo rápido ayuda a construir emoción, si utilizas anécdotas o experiencias mientras hablas con rapidez, conseguirás transmitir la emoción a tu audiencia. Si usas un ritmo lento, incluso una pausa te servirá para enfatizar con fuerza un punto o palabra clave.
Relajar la voz durante tu presentación creará una gran diferencia. Al principio esto puede parecerte difícil, pero con práctica lo conseguirás. Recuerda que relajar los músculos de la garganta, relaja tu voz. Una voz calmada suena mucho mejor y es más agradable para tus oyentes. Además, te ayudará a articular adecuadamente y el público entenderá mejor tu mensaje.
Fuente:
5 claves para hacer una buena presentación
http://www.soyentrepreneur.com