La salida de la petrolera tras el fracaso de la renegociación del contrato de operación en ese país fue negociada directamente por el Gobierno brasileño y no afectará las relaciones bilaterales, según un asesor del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
«Conversamos mucho sobre el asunto y tomamos la decisión que nos pareció más adecuada», afirmó el asesor de la Presidencia brasileña para Asuntos Internacionales, Marco Aurelio García, al diario económico Valor.
El funcionario dijo que el Gobierno brasileño condujo las negociaciones con Petrobras y con el Gobierno del presidente de Ecuador, Rafael Correa, y llegó a la conclusión de que la mejor solución era salir del país.
«Quedó claro que no había más ventajas para ninguno de los dos gobiernos y que la decisión adoptada en nada afecta las relaciones entre los dos países», agregó el asesor de Lula.
La salida de Petrobras de Ecuador fue confirmada anoche por el Gobierno ecuatoriano poco antes del fin del plazo que tenían las petroleras privadas para sustituir los contratos de participación por otros de prestación de servicios.
La compañía brasileña no se ha manifestado hasta ahora sobre su situación en el país andino.
Mientras que empresas como la hispano-argentina Repsol YPF, la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) de Chile, la italiana Agip y las chinas Andes Petroleum y Petroriental llegaron a acuerdos para suscribir nuevos contratos con el Estado de Ecuador, Petrobras, la canadiense Canadá Grande, la estadounidense EDC y la china CNPC rechazaron los nuevos acuerdos.
Las empresas que optaron por abandonar Ecuador eran responsables del 14% del bombeo privado de petróleo en el país.
Petrobras opera el Bloque 18 y el campo unificado Palo Azul, en la Amazonía ecuatoriana, de donde extrae unos 20.000 barriles diarios de crudo.
La empresa brasileña rechazó la tarifa de retribución ofrecida por el Gobierno ecuatoriano por sus servicios, así como algunas de las cláusulas legales de los contratos, que restringen la capacidad de las empresas de presentar demandas contra el Estado por incumplimiento de contrato.
«No nos ofrecieron nada mejor que el contrato de participación e, incluso que Petrobras continuase como prestadora de servicios, lo que no es, la tarifa sugerida no era compensadora», afirmó el director del área internacional de Petrobras, Jorge Zelada, igualmente en declaraciones a Valor.
El ejecutivo de la petrolera agregó que ahora comenzarán las negociaciones para definir las compensaciones que Petrobras recibirá por las inversiones que hizo en Ecuador y que aún no han sido amortizadas.
Agregó que la negociación por las indemnizaciones no tendrá dificultades y no «preocupa» a la compañía debido a que todas las inversiones pueden ser comprobadas.
«Ese asunto (las indemnizaciones) no lo tratamos (entre los gobiernos). Es algo que tiene que ser negociado entre Petrobras y el gobierno ecuatoriano», aclaró García.
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