Encuesta de la Andi y otros gremios muestra que la producción cayó 1,1% en el primer semestre del año.
La recesión de la industria colombiana ha costado 145.000 empleos en la primera mitad de este año, y alrededor de 1,4 billones de pesos a la economía nacional, en tres trimestres, hasta marzo de este año.
En medio de esas difíciles circunstancias, este sector tiene desde hoy su máxima cita anual, con la asamblea de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), en Pereira.
La caída que se viene presentando desde el año pasado tuvo ayer una nueva confirmación, cuando la Andi reveló los resultados hasta junio de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (Eoic), que realiza junto con otros siete gremios.
Luego de que hasta mayo esta encuesta registraba un ligero crecimiento de 0,2 por ciento en la producción, en junio hubo una fuerte recaída, que llevó a que en los primeros seis meses del año se presente un descenso de la producción industrial de 1,1 por ciento. Entre tanto, las ventas totales internas y las exportaciones tuvieron crecimiento cero.
El Dane, por su parte, debe presentar dentro de una semana el resultado de su Muestra Manufacturera, también correspondiente a junio.
De acuerdo con la encuesta de hogares del Dane, que le toma el pulso al mercado laboral, durante el primer semestre de este año hubo, en promedio, 145.000 empleos menos en la rama de industria manufacturera, en comparación con el mismo periodo del 2012.
En promedio, durante la primera mitad del año pasado hubo 2,68 millones de empleos en la rama industrial, y este año bajaron a 2,53 millones.
De esta manera el aporte de los empleos en industria al total de puestos de trabajo se redujo de 13,1 por ciento en el primer semestre del 2012 a 12,3 por ciento en el presente año.
Así mismo, la caída de la industria le ha restado 0,15 puntos porcentuales al crecimiento económico del último año, pues la producción se ha reducido continuamente desde el tercer trimestre del año pasado hasta el primer trimestre del 2013, en comparación con los mismos trimestres de un año atrás.
El valor acumulado de esa disminución llega a un billón de pesos a precios del 2005, que equivalen aproximadamente a 1,4 billones de pesos en los niveles de precios actuales.
Entre los sectores que impulsan la caída se encuentran textiles, ingenios azucareros, confecciones, siderurgia y caucho (llantas).
El descenso de la producción industrial tiene varias razones, entre las más mencionadas de las cuales está la situación internacional, especialmente en Europa y algunos mercados latinoamericanos, como Brasil.
“Hay un excedente mundial de acero, y países como México están tratando a toda costa de ganar mercado en Colombia”, dijo el presidente de Acerías Paz del Río, Vicente Nuero. La compañía arrastra perdidas en los últimos 18 meses.
El presidente de Enka, Álvaro Hincapié, atribuyó recientemente la caída de la industria más a factores de demanda internos y externos, y no cree que sea por los TLC porque desde los 90 la economía colombiana está abierta.
VILLEGAS DEJA LA ANDI
Luis Carlos Villegas, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional del Empresarios de Colombia (Andi), dejará el cargo en los próximos meses.
La dimisión será presentada ante la asamblea del gremio, que se reúne desde hoy en Pereira.
Villegas no se postularía para un nuevo periodo en marzo del 2014, cuando sería designado su remplazo. El dirigente llegó al cargo en 1996 y, tras sus 17 años de gestión, se rumora que puede pasar a ocupar un puesto en el alto Gobierno.
‘NO SE PUEDE SER COMPETITIVO EN TODO Y HAY QUIENES DEBEN COMERCIALIZAR’
Con la situación que vive la industria y el proceso de apertura económica, sale a la luz una verdad de a puño, según Jorge Mejía, presidente GM Colmotores, y es que “el país no puede ser competitivo en todo”.
Para el empresario, este es un momento para identificar los sectores en los que al país le ha ido mejor.
“Ahí, las puertas que se abren hacen que uno produzca más, crezca más y exporte más, y aquellas que no son competitivas muy probablemente cambiarán su modelo y decidirán solo comercializar. Esa es la esencia de un proceso de apertura”, afirma Mejía.
El director de la Coalición para la Promoción de la Industria Colombiana, Raúl Ávila Forero, aconseja hacer un análisis a escala microeconómica que diagnostique el estado actual de la industria.
“El análisis nos dará línea sobre las perspectivas futuras de cada una de las 48 ramas productivas que componen el sector industrial del país, para ver cuáles definitivamente tienen potencial y cuáles coyuntural y estructuralmente pueden ser los sectores que deben tener un cambio estratégico”, dice.
Ávila agrega que ya se pueden ver los efectos de la recesión.
“El bajo desempeño de nuestra economía en los últimos meses ha destruido empleos en los sectores industrial, agropecuario y de la construcción que no han podido recuperarse”, comenta.
El director de la Coalición recomienda ver con lupa los sectores de servicios, comercio y restaurantes, en donde han venido creciendo el número de empleos. “Se debe analizar con cuidado si los nuevos empleos generados son de corte temporal o permanente”, aconseja.
De acuerdo con Mauricio Hernández, economista del BBVA Research, la actual situación de la industria se ha visto reflejada en la generación o disminución de empleos.
“El empleo en la industria, según la Gran Encuesta Integrada de Hogares en las trece principales ciudades, tuvo una tendencia negativa en términos interanuales desde el trimestre móvil agosto-octubre de 2012 hasta el trimestre móvil terminado en abril de 2013”, explica el analista.
Desde entonces, dice Hernández, hasta los últimos datos disponibles en junio, mostró un mejor desempeño, pero aún con tasas de creación de empleo bajas. Este mejor desempeño de los últimos meses se confirma con los datos de contratación de horas extras, los cuales mostraron crecimientos mensuales desde febrero de 2013 y anticipan la contratación de nuevos empleos”.
A la pregunta de si los TLC han contribuido a generar la actual situación de crisis de la industria, el presidente de GM Colmotores descarta que así haya sido.
“El TLC con la Unión Europea entró en vigencia este mes; el de Estados Unidos, hace un año, y el de Corea no ha entrado en vigencia y no ha recibido la aprobación definitiva del Congreso. Por esa razón todavía no podemos hablar de que los TLC estén generando actualmente una crisis en la industria”, afirma Mejía.
Lo que sí dice que se está experimentando actualmente en el país es un impacto de una menor demanda.
Por su parte, Ávila dice que si bien los tratados de libre comercio no han contribuido totalmente a esa situación, el aumento de las importaciones de bienes manufacturados, no necesariamente de maquinaria y equipo para la industria, han venido desplazando los productos que demandaban los colombianos, que eran producidos localmente para abastecer la demanda interna.
Fuente:
Caída industrial cuesta $ 1,4 billones y 145 mil puestos
