El experto en temas energéticos Roger Tissot dice que el país va bien, pero se podría hacer más.
Para que el auge del sector petrolero colombiano dure más tiempo, cada vez deben vincularse al negocio más jugadores, no sólo extranjeros, sino locales de todos los tamaños, de tal manera que se conforme una especie de cluster (grupo) petrolero que pueda concretar hallazgos, producir más y generar un efecto multiplicador en la economía.
Así lo señala Roger Tissot, consultor de temas de energía, al considerar que si bien las cosas van por buen camino, aún se puede hacer más para que el cuarto de hora del sector se mantenga por mucho más tiempo.
Actualmente existen una serie de elementos que tornan incierto el panorama petrolero del país hacia adelante.
Entre ellos figuran la ausencia de hallazgos, el agotamiento de los pozos existentes y las deficiencias en infraestructura.
Aunque Ecopetrol es el principal actor y ha hecho grandes esfuerzos en todos los frentes, la realidad es que las pequeñas petroleras están contribuyendo con una cuota muy alta en el sector y en ellas también está sustentada la esperanza de encontrar más crudo.
Por ello, el experto considera que es clave atraer más inversión para este tipo de empresas, pero no sólo del exterior, sino que haya mayor presencia de locales en este negocio.
“Hay que asegurarse de que cada vez más empresas pequeñas participen en Colombia bajo condiciones atractivas, que puedan crecer y que se vea más liquidez, no que sea un solo boom y luego se vayan”, dice.
La idea no es que exista una gran empresa que se dedique a todo, sino que existan pequeñas firmas locales especializadas en una tarea puntual, para que así se cree una especie de cluster del sector petrolero, cuyos beneficios se expandan a otras áreas de la economía.
Si bien es cierto que el sector petrolero es intensivo en capital, la realidad es que hay campos pequeños en ciertas zonas del país que por sus características no requieren inversiones tan elevadas.
Tissot explica que este modelo se ha adoptado con gran éxito en Alberta, Canadá, en donde hasta las personas del común invierten en las microempresas petroleras.
De esta forma, considera que un modelo de este tipo podría funcionar en Colombia, en la medida en que hay muchos pozos medianos y pequeños, que no resultan atractivos para las grandes empresas, ya que no hay expectativa de hallazgos lo suficientemente grandes como para que logren tener un impacto en su valoración de flujo de caja o que presione sus acciones al alza.
Así las cosas, el experto considera que los proyectos petroleros deben tener más acceso a financiación local y que “quienes tengan experiencia en este negocio no se conviertan únicamente en intermediarios de capital extranjero”.
Por eso, cree que uno de los temas importantes es continuar democratizando el negocio petrolero, vía profundización de los mercados financieros.
Sostiene que en este frente ya se ha avanzado gracias a la entrada a la bolsa de Ecopetrol y de las canadienses Pacific Rubiales y Canacol, pues han ayudado a despertar el interés de inversionistas y a entender la volatilidad y los riesgos.
La otra realidad es que se está produciendo una cantidad cada vez mayor de crudos pesados y por ello, Tissot dice que el país debe desarrollar más mecanismos para trabajar con esta circunstancia, por ejemplo mejorando el uso de la tecnología.
Producción petrolera del país llegó a 927.000 barriles diarios
La cifra de mayo superó la meta del Gobierno para el cierre del año, que era de 920.000 barriles.
La producción de petróleo del país continúa al alza y al cierre de mayo se ubicó en 927.000 barriles por día.
De acuerdo con el ministro de Minas y Energía, Carlos Rodado, el resultado del mes anterior representa un incremento anual del 19,4 por ciento, toda vez que en el mismo período del 2010 se ubicó en 776.000 barriles por día. Los resultados llevaron al funcionario a apostar a un nuevo propósito de producción al cierre del año, que fue elevado a 960.000 barriles diarios.
Al tiempo, el Gobierno confirmó que las reservas probadas de crudo al cierre del año pasado cerraron en 2.000 millones de barriles, resultado que podría variar a la espera de la confirmación de dos reportes.
Los principales campos que contribuyeron a mantener estables las reservas (en el 2009 cerraron en 1.988 millones de barriles) fueron Quifa, que adicionó 100 millones de barriles, Rubiales con 60 millones, Castilla – Chichineme, que aportó 50 millones de barriles, y el Campo Jazmín con 30 millones de barriles.
Entre tanto, la producción de gas natural en mayo fue de 996 millones de pies cúbicos al día, lo que refleja un descenso del 10,27 por ciento, que se explica por los mayores niveles de generación eléctrica.
Situación de vecinos jugó a favor
Buena parte del aumento en la inversión para petróleo en Colombia tuvo que ver con el entorno poco amigable para el sector en Venezuela y Ecuador.
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