Commodities un «boom» con sabor agridulce para el país

El apetito por los commodities, que los inversionistas o fondos de inversión, acostumbrados al riesgo y a la especulación han llevado a marcar en el mercado precios máximos, tiene un efecto en Colombia con sabor agridulce por la tasa de cambio.

Si bien existe en Colombia una fiebre de oro que ha acelerado la necesidad de las firmas que explotan de incrementar la producción y están apresurando las exploraciones haciendo millonarias inversiones para aprovechar el boom de precios que puede traducirse en mayores regalías para el país, en otros productos intensivos en mano de obra, la felicidad no es completa.

La tasa de cambio le aguó la fiesta a más de un productor cuando los precios de las materias primas cotizadas en bolsa en valores internos, específicamente para azucareros y cafeteros.

En estos últimos, mientras el precio del grano en la bolsa de valores de Nueva York, marca máximos en 13 años, alcanzado cotizaciones promedio sobre 1,90 dólares por libra, el precio interno, es decir, el que le llega directamente al bolsillo de los cafeteros, está descolgado y el viernes pasado volvió a situarse por debajo de los 800.000 pesos la carga de 125 kilos. La razón cae en su mayoría en la revaluación.

Si bien el precio sigue dejándole margen a estos productores, resulta ser muy inferior al pagado en el primer semestre de 2009 que llegó a tocar el techo del millón de pesos la carga con una cotización en bolsa sobre 1,40 dólares pero una tasa de cambio en 2.000 pesos y un diferencial o prima (que el mercado le paga al café colombiano) tocando un máximo de un dólar.

Esto hace que para los productores cafeteros este boom del commodity no lo sientan en su plenitud, aún cuando reconocen que sin ese efecto de la cotización internacional hoy los cafeteros con un peso revaluado estarían en la ruina.

«La disminución del diferencial y sobre todo la revaluación han evitado que el aumento del café en Nueva York se traduzca en un mejor precio al cafetero. Eso ha sido una mezcla letal y ha hecho que en una semana el precio interno baje de 850.000 pesos la carga a 780.000». sostuvo el dirigente cafetero Mario Gómez.

El azúcar, como bien básico agrícola tuvo sólo hasta 2009 alzas significativas marcando históricos en los últimos 28 años de 30 centavos de dólar por libra. Este año la cotización ha bajado pero sigue marcando buenos precios entre 19 y 20 centavos promedio de dólar por liba y hasta 24 centavos.

Según el presidente de Procaña, Guido Mauricio López, aunque el alza en el commodity sí se ha visto reflejado en el productor que por tonelada de caña le quedan hoy 65.000 pesos -hace dos años eran 42.000 pesos- el precio pagado al proveedor es un ponderado entre las ventas del mercado nacional y las de exportación y aquí incide el dólar.

«Este boom es positivo porque da mayor margen de rentabilidad y por lo tanto motiva las inversiones en infraestructura que pueden generar empleo. Pero podría ser mucho mayor el efecto en el productor y en la industria si la tasa de cambio no estuviera tan baja «, aseguró.

Especulación

El auge de los commodities, que viene desde 2005, se ha despertado por la necesidad de los fondos de inversión e inversionistas en general de buscar portafolios alternativos seguros ante la baja de las tasas de interés en Estados Unidos y en Europa y la caída de las acciones, tras la recesión reciente. Esto indica que el efecto es más especulativo que por demanda, de ahí la volatilidad, aunque no se desconoce que China e India han presionado los bienes básicos porque han salido a demandarlos por crecimiento.
Según dijo la analista de Mercados Derivados para MF Global, Yamile Castañeda, los bienes agrícolas han tenido un repunte fuerte. «En julio vimos el trigo subiendo más de 40 por ciento y ese es el máximo desde 1970», sostuvo.

Sin embargo para el presidente de la Asociación de Agricultores de Colombia (SAC), Rafael Mejía, el país no ha aprovechado el boom por las materias primas porque no tiene infraestructura ni producción para mercados internacionales en grandes volúmenes, más allá del café y el azúcar.
Pero por otro lado vienen los bienes básicos que produce Colombia como metales y petróleo que también se ven afectado por el efecto de la revaluación.

Al contrario de los agrícolas, éstos, no son intensivos en mano de obra, y han despertado una verdadera fiebre que hoy en buena parte son responsables de la inversión extranjera directa que llega al país y del incremento en las exportaciones, factores que paradójicamente, impulsan la tasa de cambio a la baja.

En el crudo los analistas no ven variaciones importantes en la cotización más allá de lo que se ve hoy (entre 75 y 85 dólares por barril), pero en el oro la cosa parece ser a otro precio. El viernes pasado el metal alcanzó un nuevo máximo y cerró a 1,280 dólares la onza.

El presidente de la Cámara Colombiana de Minería, César Díaz, dijo que al incrementarse el precio de este commodity las empresas tienen mayor interés en aumentar la producción y por lo tanto concentrarse en exploración haciendo millonarias inversiones.

«Eso motiva a las empresas en explotación a incrementar los volúmenes y a las que están explorando a acelerar los procesos para alcanzar a aprovechar el boom. Por esta vía se genera empleo, mucho es profesional en áreas de medio ambiente y social «, sostuvo.

Pero los efectos colaterales también llegan. Los altos precios han desatado un auge de la explotación informal derivada de aquellos que sin títulos trabajan minas para subsistencia. Pero también de la ilegal que patrocinan los grupos al margen de la ley.

Al respecto, el ministro de Minas y Energía, Carlos Rodado, anunció la expedición de un documento Conpes en el que se establezcan los lineamientos a seguir para combatir la explotación minera ilegal en el país.


Oro refugio de los fondos

El oro viene siendo el refugio de los fondos de inversión que han llevado al precio del metal a batir récords. Y aunque algunos vaticinan que dichas cotizaciones no serán sostenibles, según el presidente del Organismo Interamericano de Minería, Aurelio Martínez, los proyectos mineros crean empleo y tienen efectos en la demanda de suministro de bienes.


Café los suaves siguen escasos

En la escasez de los cafés arábigos suaves producidos en Colombia, Centroamérica y algo en África, está sustentado los máximos marcados por este commodity en la plaza bursátil de Nueve York. De acuerdo con la OIC el comportamiento de los precios se ve en la incertidumbre en cuanto al abastecimiento a corto plazo a pesar de que se prevé en Brasil buena cosecha.


Petróleo se prevé estabilidad

La perspectiva es que el crudo termine el año entre los 70 y 80 dólares por barril y para los próximos dos años los analistas le apuestan a un rango similar sin mayores alteraciones. El presidente de Ecopetrol, Javier Gutiérrez, dijo que para 2010 el presupuesto está sobre una proyección de 55,70 dólares por barril. Lo que indica que tendrá más ingreso de lo esperado.


Azúcar, precios al alza

Sólo hasta 2009 el precio del azúcar en el exterior empezó a sentir el efecto de otros productos básicos con cotizaciones al alza en las bolsas donde se transan. El año pasado marcó históricos de 30 centavos de dólar por libra y aunque para 2010 mermó su crecimiento, ha logrado llegar a máximos de 24 centavos. Sin embargo es uno de los productos básicos cuyo crecimiento ha sido sostenido.

Fuente:

Commodities un «boom» con sabor agridulce para el país

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