En vez de regalar juguetes, regale una acción. Cada vez más se piensa que en lugar de regalar dinero a hijos o nietos, es preferible invertir ese dinero en activos que dentro de unos años pueden servir para pagar la educación de esos chicos. La próxima decisión es saber qué inversión elegir.
Esos frutos van a poder ser usados por el pequeño una vez que sea mayor. Y van a poder solventar cualquier sueño que éste tenga. Desde solventar los gastos que implica estudiar en el exterior, convertirse en el capital inicial de cualquiera de las actividades que quiera desarrollar el chico o simplemente ayudarlo a vivir experiencias atractivas. En definitiva: le va a permitir lograr un grado de libertad impensado para un chico de 18 o 20 años.
Uno de nuestros lectores que nos comentó sobre este, nos escribió lo siguiente:
«Buen día, he decidió regalarle a los ´menores´ una cuenta de inversión (a nombre de los padres), para que allí depositen sus ahorros. Además, mi intención es regalarles para sus cumpleaños, navidad, etc., una ´inversión´ en lugar de cosas materiales. La consulta es: con edades de 0 a 14 años y con aportes menores, ¿qué tipo de inversión sería la más conveniente pensando en el largo plazo?».
Vamos a un ejemplo concreto para profundizar un poco sobre la pregunta de este lector.
Supongamos que les regalo a mis hijos una acción. Entonces, en vez de gastar dinero en juguetes o ropa, voy a comprar una acción para cada uno de ellos. Supongamos que estoy generoso y gasto US$ 500 en cada uno cuando cumplan 2 años.
La condición que tiene el regalo es que sólo van a poder usar ese dinero cuando terminen el colegio. Por lo tanto, recién a los 18 años, cuando sean mayores de edad, van a poder usar ese capital. Es decir, tenemos 16 años por delante.
La pregunta que surge es en qué invertir ese dinero. No tengo duda que por el tipo de inversión que se trata, una inversión a largo plazo, voy a invertir en una acción de una empresa tecnológica. Es decir, una firma con alto potencial de crecimiento a largo plazo.
Supongamos que tengo suerte y que elijo una acción de una empresa que está recién comenzando a cotizar en la Bolsa y que luego de varios años es muy exitosa. Supongamos que tengo la suerte de invertir en empresas similares a Apple o Google, cuando comenzaron a cotizar por primera vez.
Veamos cuál fue el retorno de estas empresas desde que comenzaron a cotizar…
Impresionante, ¿no? Apple en 28 años creció casi un 20.000%. Y Google en 8 años casi un 500%. Si hubiese invertido US$ 5.000 en acciones de ambas empresas cuando salieron a la Bolsa, hoy hubiera tenido casi un millón si invertía en Apple y casi US$ 30.000 si invertía en Google y esperaba 28 y 8 años, respectivamente.
Entonces, sigamos nuestro razonamiento, supongamos que logro elegir empresas similares a Google y Apple. Para simplificar, hagamos los cálculos con la regla de tres simple para obtener la rentabilidad que obtendría para el plazo de 16 años, que es el tiempo que mis hijos tienen por delante.
En el caso de Apple, si en 28 años tuvo un rendimiento del 20.000%, infiero que en 16 años hubiese tenido un rendimiento del 11.000%. Y en el caso de Google si en 8 años tuvo un rendimiento del 500% infiero que en 16 años voy a tener una rentabilidad del 1.000%.
En base a estos números, ¿cuánto dinero tendrían mis hijos dentro de 16 años con el regalo que les doy hoy?
Si logro invertir en una acción como Apple, a los 18 años tendrían un ahorro equivalente a US$ 55.000. En cambio, si logro invertir en una acción como Google, tendría un ahorro de US$ 5.000.
Por supuesto que estoy haciendo un cálculo muy aproximado, sólo para que se entienda el punto.
Lo concreto es que si logro elegir la mejor empresa posible, mi hijo va a tener un gran capital cuando cumpla 18 años. Va a poder pagar su educación con creces si la quiere hacer en el país y estará cerca de pagar su educación en las mejores universidades del exterior.
En cambio, si hago una buena inversión, pero no tan buena como Apple, tendré un ahorro interesante de US$ 5.000, que no me cambiará la vida, pero me ayudará.
En la vida real es posible que los rendimientos de una inversión como ésta den resultados más parecidos a los de Google que a los de Apple. Por ello, si usted realmente piensa pagar la educación de sus hijos o nietos con estos aportes, no haga un solo regalo de US$ 500. O incremente el capital o incremente los aportes anuales. Si usted, por ejemplo, regala todos los años ese mismo monto, los resultados serán totalmente diferentes. Muchos más altos, por supuesto.
Cada uno debe hacer sus cálculos personales. Pero lo importante es remarcar que es posible pensar en el largo plazo a pesar de la volatilidad de nuestra economía. Existen inversiones atractivas, inversiones que tienen todo para multiplicarse varias veces en los próximos años. Inversiones que pueden cambiar el futuro financiero de su familia.
El tema es que hay que informarse, ocuparse y educarse. Como cualquier otra actividad de la vida, la inversión de nuestros ahorros tiene sus reglas y es necesario tener ciertos conocimientos para hacerlo bien.
Gracias al desarrollo de Internet y de los mercados de capitales globales hoy es posible acceder a todo este conocimiento y herramientas de una forma muy fácil. Y estamos totalmente comprometidos a acercarle ese conocimiento…Federico Tessore. Para Inversor Global
Fuente: El regalo de invertir en sus hijos o nietow