Lo compromete con los casi 7 millones de clientes, con los accionistas, que esperan que este abogado de la UPB garantice una alta rentabilidad y mantenga al banco en el liderazgo en el que lo deja Jorge Londoño Saldarriaga.
Carlos Raúl Yepes es un hombre sencillo, cálido, que resultó ser un verdadero ‘palo’ porque no estaba en la baraja de nadie, asegura que trabajará por los clientes, por mantener una cercanía con ellos y por llevar al banco por el camino del crecimiento.
Cuéntenos detalles del proceso de designación como Presidente de Bancolombia… ¿Cómo fue?
La junta directiva tiene un comité de nominación el cual se integró con David Bojanini, Jose Alberto Vélez, Carlos Piedrahíta y Ricardo Sierra. Se apoyaron en Egon Zendher para adelantar el proceso de manera objetiva e informada. Con los diferentes criterios y elementos de juicio tomaron su decisión, la cual fue comunicada una vez se llevó a cabo la sesión de junta citada de manera extraordinaria el pasado 26 de noviembre.
A los 46 años tiene usted un reto muy grande: la Presidencia del banco más grande del país…
Así es. El reto es inmenso no solo por lo que significa tomar las riendas de una institución tan valiosa e importante para el país como lo es Bancolombia, sino por conservar y profundizar en todo lo bueno que se ha hecho y en especial en el legado de Jorge Londoño y su equipo de trabajo. Un legado que no solo muestra una extraordinaria y destacada gestión empresarial sino que además deja una profunda cultura ética, rica en valores tan necesarios en esta época.
Cuando a uno le dicen, ‘usted va a ser el Presidente’ de semejante Grupo pues siempre se siente algo… ¿Qué sintió?
Se tienen sentimientos y sensaciones inimaginables. Mira uno hacia atrás para indagar por las razones y motivaciones que se tuvieron para hacerle a uno semejante designación, pero igualmente se mira hacia el futuro, el cual veo con muchas ilusiones, con mucha esperanza, no sólo frente al banco sino para nuestra patria y nuestros hijos. Hay mucho por hacer y ahí estaremos, sin desfallecer, a cada segundo para hacer de Colombia, desde nuestra posición, una sociedad más justa, más equitativa y más inclusiva.
¿Qué consejos le va a pedir a Jorge Londoño?
A Jorge Londoño hay que pedirle más que consejos. Hay que pedirle su experiencia, su conocimiento, su transparencia en el actuar, su don de gentes. Él puede que no esté permanentemente, pero a él necesariamente tendremos que acudir. Trabajé con él casi quince años, primero como funcionario del banco y luego en la junta directiva, por eso sé, de primera mano quién es, sé de su buen juicio, su transparencia, su dedicación y sabiduría, esto es lo que necesitamos.
¿Qué pueden esperar la junta directiva, los empleados, accionistas y clientes de Carlos Raúl Yepes?
Los cambios generan expectativas en todos los que participan de la dinámica de una empresa. Continuaremos con todo lo bueno que se ha hecho y construido, seguiremos buscando oportunidades, trabajaremos mucho, con seriedad, disciplina y respeto. Seremos austeros. Soñaremos con que el banco sea más querido, más apreciado, más cercano a las personas, sea quien fuere. Seguiremos en la senda del crecimiento, la rentabilidad y la consolidación empresarial, pero no solo desde lo financiero y económico sino también desde lo social y lo humano.
Bancolombia es una entidad que está en crecimiento. ¿Hacia dónde la quiere llevar a nivel nacional e internacional?
Está y seguirá en crecimiento, lo importante es que el crecimiento sea sostenible en el tiempo, habrá que despegar toda la imaginación y la innovación para lograrlo. Nacionalmente tendremos que seguir siendo los mejores en todo sentido, tenemos que seguir siendo la mejor opción de servicios financieros integrales, tenemos todo para lograrlo. Internacionalmente tendremos que seguir creciendo, llegando donde nos pueden necesitar, donde nuestro modelo de negocio se pueda aplicar, donde encontremos oportunidades de mercado por su estabilidad económica y social y obviamente por la rentabilidad que podamos alcanzar.
¿Quién es Carlos Raúl Yepes en su vida cotidiana?
Hablar de uno no es cómodo, pero en el día a día, soy una persona que me gusta estar mucho en mi trabajo, moverme, estar con mi esposa e hijos compartir sus actividades, dialogar con la gente. Trato de hacer ejercicio cuando los viajes, los aviones y los hoteles lo permiten. Me gusta mucho estar con los amigos, leer de todo, me gusta toda clase de música y sobre todo el fútbol, me gusta el estadio, su ambiente, paso muy bueno cuando me voy para allá los domingos, por ahí tenemos una barra muy buena para gozar con este deporte.
¿Cómo quiere ganarse el corazón de los clientes, actuales y potenciales?
Este sí que va a ser uno de los grandes retos. Para mí el cliente es fundamental, pero no desde una óptica exclusivamente económica. Me merece toda la consideración y respeto, todos, absolutamente todos en el Grupo Bancolombia nos tendremos que volcar por completo hacia el cliente, a entender sus necesidades y sus expectativas. Valorar a cada uno de los clientes será esencial. Tendrá que ser un trabajo de permanente dedicación. Si hemos fallado en el servicio y en el entendimiento de nuestros clientes, pues tendremos que revertir nuestro comportamiento hasta encontrar la verdadera satisfacción de quienes nos pagan por lo que hacemos y ofrecemos.
Una de las críticas frecuentes de los usuarios del sector financiero colombiano son los costos por los servicios. ¿Qué opina usted de este tema?
Creo que es un problema de comunicación, que ha generado hostilidad y animadversión hacia lo financiero. Si uno sirve bien, le pagan bien. Si uno da a conocer qué hace y por qué lo hace, lo comprenderán muchísimo más. Lo que pasa es que existen muchos factores del costo que no se conocen, la infraestructura física, la plataforma y arquitectura de tecnología, el costo del dinero, las variables económicas, el riesgo que se asume, etc., son componentes del costo del dinero que no son explícitos para la mayoría. Vuelvo a lo mismo, a la gente hay que informarla, conocerla, entenderla. Si esto lo hacemos bien, seguro que mejoraremos mucho la imagen. A mi me preocupa mucho este problema.
¿Cómo ve el panorama de la economía colombiana?
Bien y no solo para el 2011. Creo mucho en lo que está pasando en el país, que por encima de temas políticos, ha logrado una transformación desde lo económico muy importante. La seguridad democrática y la prosperidad democrática como políticas del anterior y el actual Gobierno nos permitirán continuar por la senda del progreso. Habrá que profundizar más en lo social donde tenemos una deuda histórica y unos problemas estructurales, como por ejemplo la generación de empleo. Pero, en general lo que se ve es un país que está empujando, que está haciendo su tarea, que no podrá desfallecer en lograr sus metas. Casi todos los sectores de la economía tiene buena salud.
¿Qué espera de las reformas económicas que están en trámite?
Son de la mayor importancia, habrá que fijar prioridades pero con el acelerador a fondo. Son muchos frentes como las regalías, la salud, lo fiscal. Pero como lo dijo el presidente Santos, irá por la línea de los consensos, pero sin renunciar a la búsqueda de lo que sea mejor para el país. Las reformas darán más claridad y certeza al desempeño económico, habrá más estabilidad, más cobertura de servicios sociales y una mejor redistribución de oportunidades y beneficios. La corrupción seguirá siendo el gran lunar, el gran monstruo y por eso, habrá que ser radical en la búsqueda de una solución ojalá lo más pronto posible. No podemos seguir bajando en puestos en competitividad y transparencia de cuenta de este lastre.
¿Qué deja en Argos y qué representa esa empresa para usted?
Si hablamos de dejar, diría que dejo mi corazón y una gran parte de mi vida, llena de aprendizaje, de experiencias y de conocimiento. Dejo a muchísimos amigos y colegas. Dejo una gran cultura forjada con la dedicación, tesón y visión empresarial de José Alberto Vélez, un gran líder y señor. Haber estado a su lado ha sido una experiencia de vida, no solo desde lo empresarial sino desde la calidez de su trato amable y generoso. Pero bueno, creo que no me voy, ahí seguiremos dentro de todas estas empresas que son tan afines en valores y en estilo de trabajo y laboriosidad.
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