La nueva terminal del aeropuerto de Bogotá cuenta con 60 módulos para el registro de pasajeros, siete bandas para el manejo de equipaje y 13.000 metros cuadrados exclusivos para comercio.
El 24 de octubre y ocho meses antes de lo previsto, el concesionario Opaín entregará a la interventoría y a la Aeronáutica Civil las obras del nuevo terminal nacional del aeropuerto El Dorado.
A la medianoche derribarán los muros de drywall que separan el muelle internacional, inaugurado en octubre del año pasado, del área a la que migrará gradualmente y a partir del 25 de octubre la operación doméstica.
Por ahora, con decenas de maletas para probar los sistemas de equipaje y con técnicos recorriendo de punta a punta los 65.208 metros cuadrados de obra, el concesionario encargado de las obras de expansión y modernización del terminal aéreo hace los últimos retoques.
La nueva infraestructura cuenta con 60 módulos para el registro de pasajeros, 7 bandas para el manejo de equipaje y 13.000 metros cuadrados exclusivos para comercio.
“Pudimos adelantarnos porque contábamos con la experiencia del terminal internacional, en donde tuvimos mucho éxito con los sistemas y la operación.
Esta vez, con las entidades y los proveedores ya teníamos aprobados los diseños y los materiales que es lo más demorado”, afirma Piedad Lucía Toro Vega, jefe de arquitectura de Opaín.
En el piso y en las paredes de la obra se utilizaron materiales españoles y en el cielo raso chilenos. La pintura texturizada es mexicana, la cubierta es italiana y la fachada fue fabricada por una empresa barranquillera.
La vieja estructura, de donde salen y llegan los vuelos de Bogotá a otras ciudades del país, irá desapareciendo lentamente.
“Solo cuando la Aerocivil entregue la nueva torre de control se podrá hacer la demolición total”, comenta Toro.
A largo plazo, la intención del Gobierno es trasladar la operación regional (Easyfly, Satena y VivaColombia) al Puente Aéreo, donde Avianca concentra actualmente sus vuelos nacionales.
MC DONALD’S, EL CORRAL Y DUNKIN DONUTS TENDRÁN LOCALES
Locales de cadenas como Mc Donald’s, El Corral, Oma, Dunkin Donuts, entre otros, serán los que los viajeros encontrarán en la nueva terminal nacional.
“De los 18.000 metros cuadrados de comercio que va a tener todo el aeropuerto, cerca de 13.000 estarán en el área nacional”, dijo Toro y explicó que en la primera fase se entregaron solo algunos locales.
En el primer piso se construyeron 14 locales, en el segundo más de 100 y en cuarto, donde queda la plazoleta de comidas, se ubicaron 12.
A esta área se mudarán los más de 100 comerciantes que de la vieja terminal que conciliaron con Opaín.
Ambas partes firmaron un acuerdo en el que se pactó el arriendo mensual, muy similar en precio al de un centro comercial, y un porcentaje variable por ventas, si se supera un tope fijado entre el comerciante y el concesionario.
LA UNIFICACIÓN DEL AEROPUERTO PERMITIRÁ AGILIZAR OPERACIÓN
Hasta el momento se han invertido 900 millones de dólares en la modernización de
la terminal nacional.
Aunque el área que se estrena en un mes es para los vuelos nacionales, Opaín considera que una vez esté lista la terminal unificada pueden darse algunos cambios para agilizar la operación.
“Si bien esta es el área nacional es posible que los check-in operen integrados, y que una aerolínea, como Avianca o Lan, pueda tener en sus módulos registro de pasajeros y recepción de equipaje nacional e internacional”, comenta la jefa del área de desarrollo del concesionario, Piedad Lucía Toro.
Todo esto aprovechando que el sistema de equipaje, que es capaz de manejar 7.200 maletas por hora, hará parte de la misma red y pasa por los cinco niveles de seguridad.
El muelle nacional contará con 6 posiciones de contacto y 7 posiciones remotas.
Además tendrá 3 puertas de uso mixto (para nacional o internacional), dependiendo de la demanda.
Esta área cuenta además con 6 escaleras eléctricas, 4 esteras rodantes y 10 ascensores, con las que se espera mejorar la movilidad al interior de la terminal aérea.
Al igual que la terminal internacional, en el primer piso quedará la llegada de vuelos, oficinas y bodegas; el segundo piso para la llegada de pasajeros y nivel técnico; el tercer piso para el registro de equipaje y las salas de espera y el cuarto piso para plazoleta de comidas y servicios.
A partir de octubre, cada terminal tendrá una área exclusiva para taxis y compartirán las zonas de parqueadero.
En cuanto al Transmilenio, Opaín dice que dependiendo de la demanda y de las solicitudes de los viajeros se consideraría la opción de poner un segundo paradero del bus alimentador, que hoy deja y recoge pasajeros en el muelle internacional.
SERÁ UN AEROPUERTO PARA MÁS DE 25 MILLONES DE PASAJEROS
De los 1.000 millones de dólares que cuestan las obras de expansión y modernización del aeropuerto internacional El Dorado, con la entrega de la terminal nacional a la fecha, la inversión ya llega a 900 millones de dólares.
La ministra de Transporte, Cecilia Álvarez-Correa, estima que a través de la nueva infraestructura se muevan anualmente más de 25 millones de pasajeros.
Actualmente, por el Dorado entran y salen 6,8 millones de pasajeros en vuelos locales, mientras por el Puente Aéreo, 5 millones. Ambas terminales mueven 22 millones de viajeros al año incluyendo los vuelos internacionales.
Dependiendo de la demanda, los planes de Aeronáutica Civil son mudar la aviación privada y militar antes del 2018 a Madrid (Cundinamarca), en donde se construirá un aeropuerto complementario.
El Gobierno estima que una vez El Dorado llegue a los 28 millones de pasajeros será necesario empezar la construcción de una zona dedicada al sector aeronáutica y al turismo, que incluiría además de otras terminales, hoteles y más servicios.
La conexión entre el aeropuerto de Madrid y El Dorado se realizará a través de una línea férrea que permitirá el transporte eficiente de carga y pasajeros.
En donde hoy está Catam, el plan maestro del aeropuerto de Bogotá, que fija la hoja de ruta para los próximos 20 años, sugiere que se construyan nuevas plataformas.
Lo anterior permitirá un mayor número de posiciones de contacto para las aeronaves y menores traumatismos para los viajeros, que hoy deben esperar mientras al piloto de la aeronave le asignan una zona de parqueo.
En cuanto a tecnología, se tiene previsto el uso de torres de control móviles, mientras queda lista la nueva torre y el primer centro de gestión aeronáutico (CGAC) del país, desde donde se podrán monitorear los aeropuertos de todo el país. Las obras deberán quedar listas en abril del 2014.
Fuente:
En un mes, Aeropuerto El Dorado estrena muelle nacional
