Se dice continuamente que lo que somos hoy es resultado de nuestros pensamientos. Los seres humanos vivimos cada día llenos de sueños. Estos se han vuelto el motor, el combustible para levantarnos cada día con la energía suficiente, se convierten en la motivación permanente.
Trátese de sueños como: mejorar la calidad de vida, obtener un empleo o ascenso, incrementar los ingresos, mejorar la salud, realizar un viaje, desarrollar mejor nuestro trabajo, hacer una carrera profesional, encontrar el amor ideal, etc. La lista puede ser muy extensa. Y de eso se trata, la esencia de la vida; materializar nuestros más nobles sueños. Vivir, sentir, compartir, ya que la vida en si, es demasiado corta.
Los sueños dicen los expertos en el tema, llegan a ser realidad al utilizar eficientemente nuestra mente. Esta maravillosa computadora está compuesta por dos elementos que trabajan sincronizados. En primer lugar, lamente consciente, la que recibe todas las percepciones a través de los cinco sentidos, y la que es eficiente en la toma de decisiones a diario cuando estamos despiertos. En segundo lugar, la mente inconsciente o creativa, responsable de las funciones vitales como la respiración, circulación sanguínea, latidos del corazón, crecimiento de cabello, uñas, etc. Es esta mente la que gobierna nuestra personalidad, el carácter, nuestros deseos y sueños.
Los sueños materializados funcionan como una fábrica. Se generan partiendo de insumos (lenguaje, pensamientos, creencias, ideas), posteriormente los procesos (lo que sucede en nuestro interior, emociones, conductas, hábitos), finalmente los resultados las cosas tangibles e intangibles (destino, lo que somos, hacemos y tenemos). Esos resultados pueden ser positivos o negativos, dependiendo de nuestros pensamientos y acciones.
Se dice que el ser humano puede querer, desear, anhelar muchas cosas. Para lograrlo debe tener claro cómo entrenar la mente. Hay miles de ejemplos de sueños cristalizados a partir de un pensamiento, de una idea. Es necesario meditar y soñar más, darle mayor relevancia al inconsciente. El mundo ha cambiado y evolucionado gracias a los soñadores. La conciencia es muy útil al darle órdenes al subconsciente. Este las recibe, busca los mecanismos y herramientas para ejecutarlos.
Hoy se habla mucho de la programación de la mente. Una nueva herramienta muy utilizada, la Programación Neurolingüística – PNL, empleada con resultados sorprendentes en empresas, equipos y atletas de talla mundial, equipos de alto rendimiento, los negocios, la política, etc. Obtener los resultados no depende tanto de factores externos ni de nuestros adversarios, la mayoría de veces imaginarios. Depende básicamente de nosotros mismos, de la fuerza que tenemos en creer en nosotros mismos, de nuestra fe. De hábitos nobles como la persistencia, la fortaleza, la paciencia, y estar dispuestos a hacer lo máximo posible. A veces esos factores exógenos que nos “sabotean”, son en su mayoría “excusas” creadas por nuestro cerebro.
Si te preguntan en este momento: ¿Cuáles son tus cinco más grandes sueños, los puedes enumerar con claridad?
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