En cualquier empresa su principal valor es su gente. Las empresas líderes no ven a su gente simplemente como empleados, los valoran como talento. Individuos talentosos que son seleccionados adecuadamente, asesorados, guiados y empoderados, tienen un mayor ROI (Retorno de inversión por sus siglas en inglés) en cualquier actividad dentro de una compañía exitosa.
El talento humano es algo real que bien empleado en los negocios se traduce en apoyo tangible para la empresa. Así es como lo detallan en el libro titulado “Primero, rompa todas las reglas”, escrito por Marcus Buckingham y Curt Coffman, talento excepcional no puede alcanzar su potencial sin una gerencia excepcional.
Adquirir el mejor talento empieza al atraer a los mejores individuos para sus vacantes disponibles. En algunas ocasiones este es un proceso pasivo (publicando la vacante esperando que los individuos apliquen a ella) y en otras ocasiones es un proceso activo (identificando y contactado a los individuos correctos) Desde mi punto de vista personal, se requieren de ambos métodos para asegurar el acceso a los individuos potencialmente adecuados.
Muchos consideran que tener gran personal corresponde al 100% de la contratación. Sin embargo, realizar la contratación es únicamente el primer paso para captar personal talentoso. El personal talentoso comienza a formarse en el primer día de trabajo. Brindándoles las herramientas, la capacitación y la asesoría para que puedan otorgar su máximo potencial. Creando el correcto balance entre la adecuada administración, la autonomía y responsabilidad para que tomen real posesión de su trabajo.
Con el paso del tiempo, he aprendido que impulsar al talento para alcanzar su máximo desempeño es poner a la gente adecuada en el lugar correcto. Encontrar gente apasionada por la función que desempeñarán. Lo que es tedioso para unos, puede ser la delicia de otros. Asimismo proveer a la gente con el nivel adecuado de responsabilidad, guía y autonomía que sea la correcta para su estilo personal, ambiciones y capacidades. Algunas personas requieren retroalimentación continua, mientras otras requieren espacio para ser creativos y proactivos por sí mismos. Identificando estas situaciones y proveyendo el ambiente indicado para cada individuo, cualquier empleado con potencial destacará.
Ya sea que estés a cargo de insertar una pieza en la línea de producción, o detrás del teléfono en atención al cliente, o seas vendedor en una tienda departamental toda función que se precie de ser excelente requiere detrás un cierto talento. Independientemente de que la excelencia sea “celebre” o anónima, los grandes gerentes saben que la excelencia es imposible sin talento. Sólo trabajando conjuntamente ambas partes tendrán éxito. Los gerentes serán exitosos permitiendo que sus empleados sean lo mejor que pueden ser. Y los empleados ganan confianza y productividad cuando están en la función o puesto con el justo nivel de responsabilidad para su estilo individual.
Para poder llegar a sobresalir realmente en sus funciones, son los talentos los que permitirán llegar a la excelencia. No significa que la experiencia, la inteligencia y la voluntad carezcan de importancia, pero el talento no se enseña y es el motor del desempeño laboral de una persona.
Un buen reclutamiento comienza con una planeación estratégica del talento humano,consiste en racionalizar ciertos aspectos para una toma de decisiones eficiente y que contribuya alcanzar los objetivos financieros, de marketing y producción de la empresa.
“El personal talentoso se forma en el primer día de trabajo brindándole herramientas, capacitación y asesoría para otorgar su máximo potencial”
El concepto de la planeación del talento humano es una estrategia para la adquisición, utilización, mejora y conservación del mismo dentro de la empresa.
Este proceso de planificación consta de cuatro etapas:
– Evaluación de los recursos humanos existentes.
– Valoración del personal actual.
– Diagnóstico general del trabajo realizado.
– Determinar los recursos necesarios y disponibles (tanto económicos como humanos) para lograr los objetivos.
Analizar cada punto permitirá entender las causas, crear políticas internas eficientes y establecer el plan de control y monitoreo que utilice tanto técnicas cualitativas como cuantitativas. Las organizaciones y empresas se enfrentan a una variedad de problemas de oferta y demanda, la planificación tendrá que poner en equilibrio sus estructuras y optimizarlas.
Por eso, es importante que antes de iniciar el proceso de reclutamiento las empresas tengan claro además de las vacantes, las funciones a desempeñar y la cantidad de personal que va a requerir, qué experiencia, inteligencia, voluntad y talento requiere de su candidato para que al momento de seleccionar y realizar la contratación correspondiente, sea un empleado talentoso que haga a la empresa exitosa.
Fuente:
La clave detrás del éxito: el talento