Así como las crisis financieras personales afectan a toda la familia cuando el jefe del hogar tiene problemas, lo mismo pasa en el trabajo. Las empresas pueden verse seriamente afectadas por cuenta de los problemas financieros y emocionales de sus empleados. Cuando un empleado tiene problemas con sus finanzas personales, esto acaba influenciando su productividad, de forma que los resultados se verán afectados. Situaciones de este tipo han llevado a las empresas a invertir en programas de calidad de vida y hasta de asesoría financiera con el objetivo de mejorar la participación, el compromiso, la productividad y retener buenos profesionales en esos momentos de dificultades personales.
Durante las últimas dos décadas varias instituciones gubernamentales de los Estados Unidos han estado realizando investigaciones con el fin de cuantificar las pérdidas ocasionadas por el “estrés financiero” de los colaboradores en las empresas. Sus investigaciones han dado resultados concluyentes:
1) El 30% de los empleados (en EE.UU.) tiene serios problemas financieros que afectan su desempeño laboral.
2) El tiempo de trabajo que éstos gastan tratando de resolver sus problemas financieros está entre siete días al año (los menos afectados) y 30 días (los más afectados). Esto significa un 7% de tiempo laboral, en promedio.
3) Programas internos de educación sobre finanzas personales ayudan a resolver los problemas financieros y, por lo tanto, reducen el estrés, lo cual se traduce en un aumento significativo de la productividad de esos empleados y por lo tanto de la empresa.
Muchos empresarios consideran que más que un gasto es una inversión por lo que no dudan en usar esas herramientas.
El empleado también debe poner de su parte, en el sentido de que debe separar, en la medida de lo posible, lo personal de lo profesional, evitando llevar sus problemas al sitio de trabajo y causar una exposición no deseada.
Ejemplos sobran de gente que considera que su responsabilidad se limita al empleo, pero su vida personal y sus situaciones particulares pueden terminar afectando el rendimiento de la empresa donde trabaja.
Del otro lado las empresas deben tener en cuenta que el capital humano es primordial para alcanzar objetivos y metas de la empresa, debe estar atento a las situaciones que pueden afectar a sus colaboradores, se trata de personas y no de maquinas.