Como la primera mujer al frente de una gran automotriz, Mary Barra ocupa una posición única en una industria tradicionalmente dominada por hombres. Desde su ascenso el año pasado a la presidencia ejecutiva de General Motors, Barra ha sido citada como un modelo para otras ejecutivas.
Le preguntamos qué está haciendo GM para asegurar que otras mujeres puedan seguir su trayectoria de ingeniera al máximo cargo. A continuación algunos fragmentos editados de sus respuestas, enviadas por correo electrónico.
WSJ: ¿Cuáles son algunas de las prácticas específicas que ha empleado para reforzar el avance de las mujeres en GM?
Barra: A principios de este año celebramos nuestra primera Cumbre Global GM de la Mujer, donde unas 120 líderes de la compañía se reunieron para intercambiar ideas e identificar iniciativas clave para impulsar el crecimiento y el progreso de la empresa. Las animé también a desarrollar iniciativas que puedan poner en práctica por su cuenta.
Además de apuntalar nuestros Consejos de Mujeres en todo el mundo, la gerencia de recursos humanos apoya claramente la diversidad. Al seleccionar candidatos para un puesto, no es suficiente agregar una persona diversa a la lista. El individuo tiene que ser muy capaz y tener una oportunidad seria de éxito en esa posición.
Por supuesto, quiero más, pero estoy orgullosa de que 25% de nuestro altos ejecutivos sean mujeres y que 42% de los miembros de la junta directiva sean mujeres. También lo vemos en nuestra fuerza laboral en general, con un número significativamente mayor de mujeres en las áreas de ingeniería, tecnología de la información, fabricación y otras, tradicionalmente dominadas por los hombres.
WSJ: Al pensar en GM o en la industria automotriz, ¿qué es lo que más la frustra?
Barra: En muchas industrias, incluyendo esta, vemos a mujeres negarse oportunidades a sí mismas demasiado pronto. Deben permanecer en el juego. Uno de mis primeros cargos cruciales fue el de asistente de nuestro presidente y vicepresidente de la junta. Yo estaba aprendiendo mucho y ganando exposición a nuevas áreas del negocio. En esa época tenía un niño pequeño y estaba embarazada de mi hija. Fue un reto, pero si hubiera decidido no aceptar el trabajo porque estaba empezando una familia, me habría perdido esa oportunidad invaluable.
Tuve la suerte de tener dos jefes que me exigían cumplir con mis responsabilidades y que se aseguraban de que yo estuviera haciendo una contribución al negocio, pero que al mismo tiempo me dieron siempre el apoyo y la flexibilidad que necesitaba para ser una buena madre y una buena aliada de negocios.
WSJ: ¿Los empleados de GM saben que el avance de las mujeres es una prioridad para usted?
Barra: La diversidad de pensamiento es un elemento clave de la fórmula del éxito en los negocios. Es también gran parte de la creación de un lugar de trabajo en el que uno quiera estar, lo cual es una de nuestras prioridades. Por lo tanto, yo diría que los hombres y las mujeres de GM saben que estoy muy comprometida con la diversidad.
Dicho esto, cultivar la diversidad no es simplemente contar cuántos hombres y mujeres hay en una oficina. Se trata de valorar todas las ideas y de construir equipos con personas de diferentes antecedentes y experiencias. Se trata de unir las habilidades y las capacidades correctas, proporcionando enfoque y herramientas claras, y haciendo que el equipo se haga responsable por la entrega de valor todos los días, sin importar si se es hombre o mujer.
WSJ: ¿Cómo escaló posiciones y avanzó tan duramente como lo hizo, mientras criaba dos niños?
Barra: Una vez le comenté a un gerente acerca de mi lucha por equilibrar los compromisos profesionales y personales. Su respuesta cristalizó perfectamente el tema: “Los compromisos son compromisos y honrarlos demuestra disciplina”. Es una de las razones por las que siempre animo a mi equipo —hombres y mujeres— a que reserven tiempo para sus familias o intereses personales. Todo es cuestión de establecer prioridades, y la familia ha sido y será siempre una prioridad para mí.
Fuente:
Mary Barra y lo que hace GM para promover a las mujeres
