Así el inmueble sea nuevo o usado, se deben tener en cuenta unos aspectos antes de invertir.
El paso inicial que debe dar como comprador de vivienda es establecer su presupuesto; de ahí depende el tipo de compra que puede realizar: vivienda nueva o usada, número de habitaciones, cantidad de baños, garajes y área construida en general, dependerán de sus necesidades y gustos.
Desde un computador podrá consultar los inmuebles a la venta. Con esta herramienta tendrá la oportunidad de ver fotos, videos y enviar preguntas a los vendedores. Existen páginas como www.metrocuadrado.com, que le ofrecen una completa plataforma que le facilitará su búsqueda.
Esta consulta, que es gratuita, le permitirá comparar con facilidad precios y le ahorrará llamadas y visitas a viviendas que no se ajusten a su gusto o necesidades. Tome nota de precios, áreas, servicios y otros detalles y analícelos con calma, junto con su familia, es decir, ‘consúltelo con la almohada’.
Si desea ver otras opciones, en los clasificados de la prensa escrita también encontrará ofertas; por lo general las ediciones de los fines de semana muestran más posibilidades.
Otra de las opciones a las que puede recurrir para solicitar información y asesoría son las inmobiliarias. Estas empresas le ofrecen en la mayoría de los casos opciones de vivienda usada.
Es clave que busque una inmobiliaria que tenga sede en el sector en el que desea comprar, así podrá encontrar más ofertas que le permitan hacer una mejor elección.
Las entidades financieras también le pueden proporcionar excelentes opciones de compra, aunque las diferencias de precio no sean muy grandes. Algunas compañías hacen subastas de vivienda de manera esporádica.
Indague por más viviendas a la venta, compare precios y mire qué tan comercial es la zona, pues en un futuro eso puede ser motivo de valorización. Antes de decidirse, mire varias opciones, no se case con la primera.
Cuando entregue su información de contacto, evite al máximo entregar datos de su residencia actual, salvo cuando ya esté decido por una vivienda y tenga alguna referencia de quien la vende. Por lo general, pida que lo contacten a su teléfono celular o a su sitio de trabajo.
Tenga en cuenta que en ocasiones hay ofertas falsas con personas detrás tratando de estafar a quienes buscan vivienda, ya que intuyen que tienen recursos económicos disponibles.
Al momento de negociar, pida rebaja; recuerde que normalmente los propietarios piden entre un 20 y 30 por ciento por encima del precio real, no le va a pasar nada malo por ofrecer, espere a que el vendedor la haga una contraoferta y no se precipite.
Tome el proceso con calma, no se afane. Tenga en cuenta que usted es el cliente y que la adquisición de una vivienda es una las decisiones más importantes de la vida.
ALGUNOS TIPS
Una vez en el inmueble, tenga en cuenta varios aspectos, si de comprar apartamento ya construido se trata (no sobre planos):
ÁREAS COMUNES
– Observe el estado de las zonas comunes (corredores, jardines, portería, etc.), pues de su buen estado depende en gran parte la valorización de su vivienda.
– Tenga en cuenta el número de apartamentos de su conjunto, pues hay dos caras de la misma moneda: si son muchos, por ejemplo, más de 100, la cuota de administración será más baja pero poner de acuerdo a tanta gente en las asambleas de propietarios será más complicado y la morosidad en el pago de la administración o las cuotas extraordinarias puede ser alta.
– Si va a comprar, pídale al dueño del inmueble o al administrador el estado de la cartera del conjunto, para verificar el grado de responsabilidad de los moradores en materia de pagos y la efectividad de la administración en el manejo de las finanzas.
– Solicítele al dueño los comprobantes de pago del impuesto predial y valorizaciones de los últimos años para constatar que el inmueble no tenga deudas que más tarde usted deba asumir.
– Si tiene niños pequeños, mire los espacios destinados a la recreación de los menores.
– Si compra con garaje, revíselo. Si es al aire libre, pregunte si hay normas para que los niños no jueguen pelota o monten en bicicleta o patineta, pues su vehículo puede resultar dañado; si es cubierto y en un sótano, verifique que el garaje no se inunde en tiempos de lluvia, la cercanía con los autos vecinos.
– Verifique que el vendedor esté a paz y salvo en la administración del conjunto, pues la ley de propiedad horizontal dice que el nuevo dueño asume las posibles deudas del anterior (cuotas extraordinarias, servicios, administración, etc.).
– Pregunte en la administración cada cuánto se les hace mantenimiento preventivo a las fachadas, las cubiertas y otros elementos que hacen parte de las áreas comunes.
– Indague sobre la antigüedad del conjunto y saque conclusiones.
– Revise que haya áreas sociales (piscina, spa, gimnasio, sedes sociales, etc.).
– Exija los planos del apartamento y del garaje, para que sepa hasta donde pueden llegar las adecuaciones, o para que sepa por dónde va la tubería, en caso de ruptura. Lo mismo aplica para conexiones eléctricas y demás.
– Pídale a la constructora o al propietario las garantías de construcción.
– Lleve hasta último término el traspaso o la compraventa del inmueble, para que quede claridad sobre quién es el nuevo propietario.
– Pida el certificado reciente de tradición y libertad del apartamento y del garaje.
– Verificar el estado y la capacidad de los tanques de reserva de agua potable y de las motobombas.
EL APARTAMENTO
– Verifique los acabados, la distribución de las habitaciones y el estado general del inmueble.
– Abra las llaves del agua para constatar la presión del líquido y vuelva a cerrarlas, para asegurarse de que no haya fugas.
– Lleve con usted un bombillo para verificar el adecuado funcionamiento de las rosetas o portabombillos. Revise además las acometidas de gas.
– Asegúrese de que los tomacorrientes tengan su debido polo a tierra, lo cual le ayudará a proteger a los electrodomésticos.
– Para verificar que las paredes estén debidamente construidas y ‘aplomadas’ (rectas) es bueno mirarlas de día y de noche, con luz artificial, para ver posibles defectos.
Fuente:
Ubicación y precio, las claves a la hora de buscar vivienda